En un evento exclusivo realizado por Gleeden –la primera aplicación de citas no monógamas pensada por y para mujeres– se presentó un informe revelador sobre el rumbo y futuro de las relaciones afectivas. Se trata de un estudio que indica que las personas mayores de 50 años se animan a nuevos modos de vincularse y que las monogamias van rumbo a desaparecer en los próximos 10 años. O al menos la exclusividad sexoafectiva dejará de ser una prioridad.
La exclusividad ya no es la norma
“La exclusividad ya no es la norma. Más del 50% de los argentinos ha vivido algún tipo de relación no monogámica y la tendencia sigue en alza”, indica la encuesta realizada por especialistas en psicología y sexología que incluyó la perspectiva de más de 1700 casos -de los cuales el 60% fueron mujeres- de cuatro países de América Latina: Argentina, México, Brasil y Colombia.
El informe refleja que el 52% de los encuestados ha explorado vínculos por fuera de la monogamia, siendo las formas más comunes la infidelidad (27%) y las relaciones abiertas (26%). En este sentido, las expectativas más frecuentes están asociadas a las prácticas de tríadas y swingers; algo que la pornografía tradicional pareciera destacar permanentemente influenciando posibles fantasías o elecciones.
“En los últimos años, hombres, mujeres y diversidades nos damos el permiso de al menos realizarnos la pregunta: ¿cuántos años se puede estar con la misma persona? La idea de la pareja tradicional está evolucionando; pero los prejuicios siguen pesando. La clave está en trabajar nuestra inteligencia sexual, es decir pensar nuestra sexualidad más allá de la genitalidad y pensar en nuestra emocionalidad“, afirmó Florencia Pollicita, sexóloga y asesora de Gleeden Argentina.

En la actualidad, a pesar de las intenciones, la libertad amorosa aún tiene barreras: el 86% de quienes intentaron una relación no monogámica enfrentaron obstáculos, siendo la presión social el mayor enemigo. Donde la ética y la moral representan las mayores limitaciones que se generan en un debate interno para los encuestados.
Así, la “Radiografía de la No Monogamia en Argentina” revela una evolución hacia nuevas formas de interacción, donde las apps de citas cobran una relevancia particular ante las nuevas demandas que son atravesadas también por la tecnología. “La forma en la que nos relacionamos sexoafectivamente está en constante cambio, y desde Gleeden hemos visto cómo las relaciones no monogámicas están cobrando cada vez más relevancia en Latinoamérica. Si bien comenzamos como una plataforma de citas extramatrimoniales, hemos evolucionado junto con la sociedad y las diferentes formas de amar. Por eso, con este estudio quisimos entender mejor la realidad de este tipo de relaciones en Argentina y la región”, sostuvo Silvia Rúbies, Directora de Comunicación de Gleeden Latinoamérica.
Sin dudas, con mayor reticencia, pero abiertos a nuevas experiencias, las personas mayores de 50 años se animan a nuevas formas vinculares rompiendo con las estructuras tradicionales a través de las cuales fueron aprendiendo a relacionarse. “Nos encontramos ante un cambio de paradigma… La monogamia dejó de ser la única opción después de los 50. Las parejas evolucionan y pueden replantearse qué tipos de vínculos quieren tener. Lo más importante es escucharse con ganas de entenderse y, si no se conoce el tema, informarse para no caer en prejuicios”, destacó Pollicita.

La tecnología también define un horizonte que, si bien lo hubiéramos creído distópico hace algunas décadas, hoy resulta en posibilidad para una cuarta parte de la sociedad. Con la tecnología como un modelador de espacios vinculares, con propuestas a la medida y fetiche de cada persona. Así, la percepción de los encuestados indica que un 26% prevé un auge de la soltería y de los vínculos mediados por inteligencia artificial.
Sin dudas, las nuevas formas de relacionarse sexoafectivamente van marcando nuevos horizontes que parecieran encaminarse hacia la extinción de los vínculos más tradicionales, reconfigurando escenarios donde el deseo y la comunicación adquieren mayor protagonismo. Todo funcionará mejor bajo el acuerdo de las partes involucradas, para vivir y expresar la sexualidad sin prejuicios, condicionamientos o tabúes: la forma más plena y honesta de experimentar la libertad.